
Cúantas ferias recorridas, cientos, miles de vinos probados, el disfrute de la gastronomía mendocina, multipremiada en el mundo. Y llegó la segunda edición de La Morada Food & Wine Fest. Y sacude las estanterías de los grandes encuentros y levanta la vara. Hay que prestarle atención. Buena música y unos 1500 asistentes en un lugar privilegiado: La finca ubicada en el lado sur de la ruta 94 en Los Chacayes, en Tunuyán, en el Valle de Uco, Mendoza.
Una excelente organización por parte del equipo liderado por Andrés Rosberg, expresidente de la Organización Mundial de la Sommelerie y cabeza de La Morada, en la finca Los Arbolitos. Más de 100 bodegas para todos los gustos con productos exclusivos, clásicos y muchos estrenos. Viticultores, enólogos, agrónomos y bodegueros. A la hora de disfrutar la buena morfa se montó un sistema de «tokens» o tickets que se adquirían al ingreso para pagar sin vueltas. De esta manera se hizo sumamente ágil el servicio, evitando las colas y la espera a veces eterna para conseguir una pizza, una empanada o los riquísimos platos que ofrecían la docena de propuestas. En lo particular, fueron unas cuatro horas disfrutando de la charla, los vinos, la comida y los reencuentros. Muchísimos consumidores ávidos de ser cada día más «infieles» a la hora de elegir la cantidad increíble de etiquetas presentes. A pesar de enfocarme en productos nuevos o que no conocía, se hizo totalmente inabarcable. Tal vez la próxima entrega deba durar un par de días. En definitiva, un gran evento que te deja gusto a fósforo y pide más para la tercera edición. Prometen novedades muy interesantes, pero hay que esperar un añito. Un detalle, por momentos la charla imprescindible, se complicaba por el volumen de la música cuando estabas cerca del escenario.
Datos y números
Primera edición: 900 personas. Segunda edición: 1500
Expositores: de 75 a más de 100
Propuestas gastronómicas: el año pasado 8, ahora fueron 12 (Si ponía Ahora 12, parecían cuotas)
Y dijo Andrés Rosberg a Alterrados.com: «Este año desarrollamos un sector VIP con cosechas históricas de las bodegas que participaban, donde la gente pudo comprobar el potencial de guarda del vino argentino, vimos como gente venía del Valle de Uco, de la ciudad de Mendoza, del resto de la Argentina e incluso algunos de fuera del país. A ello se les suman turistas que están en la zona y a pesar de que son diferentes edades, culturas, historias de vida todos comparten el gran amor por el vino y por la gastronomía. Y todo fluyó de una manera increíble. Se generó un círculo virtuoso. Bodegueros soprendidos porque la gente usa el spitter () y se nota que están catando con interés. La gente de familia Zuccardi con los aceites de oliva, que auspiciaron el evento, me contaba que muchos asistentes se acercaron a preguntar, algo no tan habitual en ferias de este tipo. Las bodegas están cada vez más comprometidas, y abren cada vez mejores vinos. Así se le va dando forma a un evento que brilla por el entorno, por la cantidad la calidad de los artistas convocados, por la excelencia de las propuestas gastronómicas y por los vinos. Mucha gente feliz. Feliz como yo que veo como el restaurante Hornero y la Morada se van consolidando como un nodo, como un punto de encuentro para todos los que aman el vino, sean locales o turistas. Aquí se volvió a ver el descomunal potencial vitivinícola y gastronómico del Valle de Uco. Estamos muy contentos y ya pensando cómo podemos sorprender el año que viene».

Nos dieron de comer muy bien
- Azafrán, con Sebastián Weigandt y su equipo
Brindillas, de la mano de Mariano Gallego y su equipo
Casa Vigil, con Iván Azar y su equipo
Cinco Suelos, de la mano de Patricia Courtois y su equipo
Fogón, con Lucas Olcese y Sebastián Ingallina y equipo
La VidA & Osadía de Crear, de la mano de Flavia Amad y su equipo
Piedra Infinita, con Gonzalo Guiñazú y su equipo
Quesos La Linqueñita, el capo Gustavo Schiavi y su equipo
Riccitelli Bistró, de Juan Ventureyra y su equipo
Zonda, con Augusto García y su equipo
Edward Holloway, chef de Hornero (el restaurante anfitrión de La Morada)
Blex & The Afros, Virginia Da Cunha, Puna Music y Oliverio Sofía fueron los artistas encargados de crear el ambiente con su música en vivo.